No es la primera alhaja de una personalidad famosa que adquiere
Kim Kardashian acaba de adquirir una de las joyas que un día portó la princesa Diana durante una de sus apariciones más icónicas, luego de participar en la más reciente subasta de la casa Sotheby’s, convirtiéndose en la participante que ofertó la mejor de las pujas, pues si bien, desde hace unos años la socialité ha asegurado que no usa joyas valiosas para vestir o salir a la calle, es una ferviente coleccionista de piedras preciosas.
Desde que Kim K fue víctima de un robo en una de sus visitas a París, en 2016, en la que los ladrones la amarraron en la habitación de hotel donde estaba hospedada para llevarse las joyas que llevaba consigo, la empresaria estadounidense dejó no sólo de portar pertenencias de mucho valor cuando sale de casa, sino que tampoco las resguarda en su propio hogar.
Esa fue la confesión que hizo hace pocos meses en un podcast al que acudió como invitada, pues desde que ocurrió ese acontecimiento, la más famosas de las Kardashian ha considerado que se convirtió en una persona mucho más desconfiada y temerosa, pues tuvieron que pasar muchos meses antes de que superara la etapa postraumática que le causó dicha situación.
Pero ese no fue el único cambió que nació en Kim, pues en esa misma entrevista expuso que, al sentir que su vida estaba en riesgo, apreció el verdadero valor de la existencia, restándole importancia a los bienes materiales, pues desde que se hizo famosa, a raíz del lanzamiento de su reality “Keeping up with the Kardashians”, comenzó a sentir una especie de fascinación por comprar toda clase de joyas.
Sin embargo, pareciera que si bien, no usa más que joyería de fantasía en sus publicaciones de Instagram y sus apariciones públicas, el amor por las joyas no se ha apagado del todo, pues “TMZ” dio a conocer que la celebridad acaba de convertirse en la nueva dueña del collar de diamantes morados que un día utilizó Lady D, en una de sus apariciones en Londres más recordadas por todas y y todos los seguidores de la familia real británica.
La propietaria de SKIMS estuvo presente durante la última subasta de Sotheby’s, en la cual puso sus ojos en aquella joya que Diana de Gales usó, en combinación con un vestido aterciopelado, durante una gala benéfica en 1987.
“Attalah Cross”. Foto: Casa Sotheby’s
Durante la subasta, la joya se dio a conocer bajo el nombre de “Attalah Cross”, misma que si bien, no fue una de los collares de la colección personal de la princesa Diana, hace 35 años le fue prestada por Garrad, la empresa de joyería que la fabricó; tras ser usada por Lady D, este collar pasó a manos de diferentes casas de subastas hasta que, finalmente, encontró a la mejor postora.
De acuerdo con el sitio de noticias estadounidense, Kim K adquirió la joya de incrustaciones de diamantes por 197 mil 453 dólares.
Después de que la empresaria realizara esta compra, se dio a conocer que, entre sus pasatiempos favoritos, se encuentra el de coleccionar joyas de gran valor, pero no nos referimos sólo a valor monetario, sino histórico, pues dentro de su colección también cuenta con alhajas que pertenecieron a Elizabeth Taylor y Jackie O, lo que no nos sorprende, pues cabe recordar que durante su última aparición en la Met Gala, Kim visitó el icónico vestido con el que Marilyn Monroe le cantó al expresidente John F. Kennedy, el día de su cumpleaños 45.