La ONU pide 3000 millones de dólares para proporcionar ayuda humanitaria en Sudán
La Agencia para los Refugiados (ACNUR) y La Oficina para la Coordinación de Asuntos Humanitarios (OCHA) han pedido este miércoles 3000 millones de dólares para ayudar a toda la población del país y a cientos de miles que huyen a los países vecinos.
El Plan de Respuesta Humanitaria para Sudán ha sido revisado debido al aumento de las necesidades provocado por la crisis actual, y ahora requiere 2560 millones de dólares para ayudar a 18 millones de personas hasta finales de este año.
Dicho plan se centrará en aumentar rápidamente la ayuda alimentaria, de agua y saneamiento y otras ayudas vitales. También se centrará en la protección, incluida la de los niños y la prevención de la violencia de género.
Por su parte, el Plan Regional de Respuesta a los Refugiados de Sudán solicita 470,4 millones de dólares para apoyar a los refugiados, repatriados y comunidades de acogida en la República Centroafricana, Chad, Egipto, Etiopía y Sudán del Sur. Los fondos están destinados a ayudar a más de un millón de personas.
Las necesidades inmediatas más urgentes incluyen agua y saneamiento, alimentos, refugio, salud, ayuda en efectivo y artículos básicos de socorro, ya que el desplazamiento fuera de las zonas fronterizas supone un gran reto logístico y financiero. Además, en muchos de los países de acogida se acerca la estación de las lluvias.
“El personal humanitario está trabajando duro para responder, pero necesitamos, una vez más, hacer un llamamiento a los países y personas con medios para que den un paso al frente y proporcionen los recursos necesarios para que podamos ayudar a las personas que lo han perdido todo”, declaró el alto comisionado para los refugiados, Filippo Grandi.
Los países en desarrollo, como Irak (en la foto), carecen de recursos para invertir en recuperación, acción climática y Objetivos de Desarrollo Sostenible.
Los próximos cinco años serán los más cálidos jamás registrados
La Organización Meteorológica Mundial ha publicado este miércoles su Actualización climática mundial anual a decenal, un informe en el que alerta que existe un 66% de probabilidades de que la temperatura media anual cercana a la superficie entre 2023 y 2027 supere en más de 1,5 °C los niveles preindustriales durante al menos un año. Además, hay un 98% de probabilidades de que al menos uno de los próximos cinco años, y el lustro en su conjunto, sea el más cálido jamás registrado.
“Este informe no significa que vayamos a superar de forma permanente el nivel de 1,5°C especificado en el Acuerdo de París, que se refiere al calentamiento a largo plazo durante muchos años. Sin embargo, estamos alertando de que superaremos el nivel de 1,5°C de forma temporal con una frecuencia cada vez mayor“, afirmó el secretario general de la agencia.
Petteri Taalas explicó además que se prevé que en los próximos meses se produzca un calentamiento provocado por El Niño, que se combinará con el cambio climático inducido por el hombre. “Esto tendrá repercusiones de gran alcance para la salud, la seguridad alimentaria, la gestión del agua y el medio ambiente. Tenemos que estar preparados”, afirmó.
La estrategia de “interiorización”, que funciona con el apoyo de la OIM y otras agencias de la ONU, ayuda a los refugiados y migrantes de Venezuela a empezar de nuevo.
Se necesita más apoyo para los 20 millones de personas desplazadas en América Latina
La alta comisionada adjunta de la ONU para los Refugiados ha hecho este miércoles un llamamiento urgente para prestar más apoyo a los países de América Latina y el Caribe, que acogen a la mayoría de los 20 millones de personas desplazadas por la fuerza en el continente americano.
Kelly T. Clements ha recordado que, aunque el aumento del número de personas que se acercan a la frontera de Estados Unidos ha atraído mucha atención, la mayoría de los desplazados forzosos permanecen en América Latina.
“Tenemos que fijarnos no sólo en los países de destino de los refugiados y migrantes, sino también en los países de los que proceden y por los que transitan. Los retos que plantean los complejos movimientos de población en las Américas deben abordarse desde una perspectiva regional integral y de colaboración“, añadió.
Las declaraciones han tenido lugar tras su visita a Brasil, donde estuvo con refugiados afganos y venezolanos, y a Panamá, en concreto a la región del Darién.
Clements enfatizó la necesidad de seguir apoyando iniciativas que proporcionen estabilidad y soluciones, como el aumento de las vías legales, pero que también se deben abordar las causas que provocan los desplazamientos forzosos. “Esto significa cooperar para prevenir y resolver conflictos, y hacer frente a los efectos del cambio climático, mejorar la gobernanza, la igualdad y el respeto de los derechos humanos”.
En todo el mundo, 67 países siguen penalizando las relaciones entre personas del mismo sexo, y 10 de ellos imponen la pena de muerte.
Ser uno mismo nunca debería ser un delito
Este miércoles se conmemora el Día Internacional contra la Homofobia, la Transfobia y la Bifobia, una jornada en la que el Secretario General de la ONU recuerda que “en todos los rincones del mundo, las personas LGBTQI+ siguen haciendo frente a la violencia, la persecución, el discurso de odio, la injusticia e incluso el asesinato”.
En este sentido António Guterres ha renovado su llamamiento a los Estados para que defiendan la Declaración Universal de Derechos Humanos y pongan fin a la criminalización de las relaciones homosexuales consentidas y de las personas transgénero. “Ser uno mismo nunca debería ser un delito”, sentenció.
Por su parte, el Alto Comisionado para los Derechos Humanos, ha declarado que los derechos fundamentales de todas las personas LGBTIQ+, como miembros iguales de la familia humana, deben respetarse.
“Honro el valor que a menudo se necesita para vivir una vida frente a los prejuicios, la discriminación y la violencia. Aplaudo el progreso social y la transformación de la sociedad que han liderado, beneficiándonos a todos”, añadió.
