El racismo es un problema mundial y todos los países deben adoptar una postura contra él, afirmó el lunes el presidente de la Asamblea General, en su intervención durante la última reunión del Foro Permanente sobre los Afrodescendientes, una plataforma de la ONU para mejorar la seguridad y la calidad de vida de estas personas en todo el mundo.
“El racismo y la xenofobia siguen arruinando nuestras comunidades, como cicatrices que echan a perder el tejido social. El odio y la violencia que engendran persisten, exigiendo nuestros esfuerzos colectivos para erradicar la violencia racial en todas sus formas”, dijo Csaba Kőrösi en la segunda sesión del Foro, que se inauguró este martes en Nueva York.
Transformar la injusticia
Kőrösi aseguró que para superar esto es necesario reconocer nuestra humanidad compartida, ya que los “legados no reconocidos” de la esclavitud y la segregación persisten hoy en día a través de sistemas penitenciarios opresivos y racialmente violentos, desigualdades en el acceso a la atención sanitaria y exclusión de la mano de obra.
“Debemos acabar con estas herencias inhumanas y vergonzosas, y debemos hacerlo ahora”, afirmó en su intervención en el Salón de la Asamblea General. “Creo firmemente que reflexionando sobre estas dolorosas herencias, podemos transformar realmente las injusticias del pasado en las libertades del futuro“, añadió.
Actuar con urgencia
El Foro Permanente fue creado en 2021 por la Asamblea General, tras años de deliberaciones, y en consonancia con el Decenio Internacional de los Afrodescendientes, que se prolongará hasta 2024.
El órgano contribuirá a impulsar una declaración de la ONU sobre la promoción y el pleno respeto de los derechos de los afrodescendientes, tema del actual periodo de sesiones.
Su creación cristaliza el compromiso internacional de acelerar el camino hacia la plena igualdad y justicia para los afrodescendientes de todo el mundo, declaró por su parte el Secretario General de la ONU, en un mensaje de vídeo dirigido a los asistentes.
António Guterres instó a reconocer y reparar los errores cometidos durante siglos de esclavitud y colonialismo.
“Debemos actuar con mayor urgencia para librar a nuestras sociedades de la lacra del racismo y garantizar la plena inclusión política, económica y social de los afrodescendientes como ciudadanos iguales, sin discriminación”, afirmó.
Un problema en todas partes
El hecho de que el racismo no conoce fronteras fue puesto de manifiesto por el presidente de Brasil, quien destacó los constantes abusos de los que es objeto el futbolista brasileño Vinícius Júnior, que juega en el equipo español del Real Madrid.
“La lección que podemos sacar de estos episodios imperdonables es que Vinicius Jr, un joven de 22 años, es capaz de enfrentarse a multitudes hostiles, no hay duda de que podemos y debemos hacer más para interrumpir este circuito deshumanizador de violencia”, dijo Luiz Inácio Lula da Silva en otro videomensaje.
Por su parte, la ministra brasileña de Igualdad Racial, Anielle Franco, subió al estrado para reforzar el llamamiento del presidente Lula a renovar el Decenio Internacional de los Afrodescendientes, centrándose en la memoria, las reparaciones y la justicia.
“La paz, la democracia, la seguridad internacional, la lucha contra las desigualdades y la garantía de los derechos humanos sólo coexistirán cuando se reparen siglos de racismo sistémico, caracterizado por la deshumanización, la subyugación, el trauma, el borrado de nuestra cultura y la violencia psicológica”, afirmó, arrancando los aplausos de la sala.
Homenaje a los activistas
Más de mil personas participan en el Foro, que concluye el viernes. El Alto Comisionado de las Naciones Unidas para los Derechos Humanos, Volker Türk, rindió homenaje al gran número de activistas y representantes de la sociedad civil que hay en sus filas.
“Muchos de ustedes han sido vitales para los continuos esfuerzos de los movimientos mundiales contra el racismo, incluidas las protestas de 2020 que, entre otras cosas, ayudaron a agilizar el establecimiento del Foro Permanente sobre Afrodescendientes”, dijo en un mensaje de vídeo.
Türk señaló que, durante demasiado tiempo, la discriminación racial se ha tratado como una cuestión social, en lugar de como una grave violación de los derechos humanos.
“Es urgente que responsabilicemos a los individuos de los actos de racismo y discriminación racial, y también que consideremos más profundamente el papel de las estructuras y los sistemas de discriminación y opresión que reproducen y alimentan las jerarquías raciales”, afirmó.