Estados Unidos ha vetado una resolución presentada por Brasil al Consejo de Seguridad en la que se pedía la revocación de la orden impuesta por Israel a los civiles y al personal de las Naciones Unidas de evacuar todas las zonas al norte de Wadi Gaza y reubicarse en el sur de la franja.
La resolución S/2023/773 también pedía pausas humanitarias para permitir el suministro de ayuda a civiles por parte de las agencias de socorro de las Naciones Unidas y sus socios, así como del Comité Internacional de la Cruz Roja y otras organizaciones, y alienta el establecimiento de corredores humanitarios.
En este sentido, y al igual que en la resolución propuesta por Rusia este lunes, pide el suministro de bienes y servicios esenciales a los civiles, incluyendo la electricidad, el agua, el combustible, los alimentos y los suministros médicos, y así garantizar que los civiles no sean privados de objetos indispensables para su supervivencia.
En la resolución, el Consejo condenaba los ataques del grupo militante Hamás contra Israel el 7 de octubre y la liberación de los rehenes israelíes, así como el respeto del derecho internacional y humanitario por parte de todas las partes involucradas.
Evitar los efectos colaterales en toda la región
La resolución destaca la importancia de evitar los efectos colaterales en la región y, a este respecto, insta a todas las partes a que actúen con la máxima moderación y a todos aquellos con influencia que trabajen para garantizar el cumplimiento del derecho internacional y humanitario y la protección del personal médico, sus medios de transporte y equipos, así como hospitales y otras instalaciones sanitarias.
Reiteran, además, su visión de una región donde dos Estados democráticos, Israel y Palestina, vivan uno al lado del otro en paz dentro de fronteras seguras y reconocidas.
Para que una resolución salga adelante, debe obtener al menos nueve votos y no ser vetada por ninguno de los cinco miembros permanentes (Estados Unidos, Rusia, China, Reino Unido y Francia).