El personal sanitario de Israel trabaja sin descanso tras el atentado de Hamás del 7 de octubre, en el que murieron 1400 personas y más de 4600 resultaron heridas, según el doctor Michel Thieren, representante especial de la Organización Mundial de la Salud (OMS) en Israel.
Thieren pasó casi dos semanas viajando por todo el país para reunirse con supervivientes, autoridades y familiares de más de 200 rehenes cautivos en Gaza.
Acción inmediata
La OMS ofreció apoyo humanitario a la respuesta sanitaria de Israel inmediatamente después del ataque. En aquel momento, el Ministerio de Sanidad israelí respondió que el sistema estaba haciendo frente a la situación, pero que no dudaría en pedir ayuda si fuera necesaria.
Hasta la fecha, el sistema de vigilancia de atentados contra la atención sanitaria de la agencia de la ONU ha registrado ocho ataques contra instalaciones médicas israelíes en los que murieron siete personas.
Desde un hospital en Ashkelon hasta bases militares donde se almacenan los restos de las víctimas a la espera de su identificación, el doctor Thieren visitó ciudades destruidas y desiertas y habló con supervivientes, personal sanitario y autoridades.
También se reunió con familiares de rehenes capturados por Hamás, en medio de los reiterados llamamientos de la Organización Mundial de la Salud y los asociados de las Naciones Unidas para su liberación inmediata e incondicional.
A medida que el conflicto entre Israel y Palestina se intensifica, el doctor Thieren relata que lo más sorprendete para él es que de todas las personas con las que habló, la mayoría de ellas con graves heridas de bala, metralla y quemaduras, “no querían hablar de sí mismas, sino de las personas que habían visto morir delante de ellos”.
“Casi todos esos supervivientes vieron morir a otra persona antes de ser heridos. Están absolutamente atormentados por esto. Esto domina sus pensamientos. Muchos necesitan ayuda urgente en materia de salud mental”, afirmó.
Problemas de salud mental
El hecho de que tantos israelíes sigan retenidos como rehenes por Hamás significa que no hay oportunidad para que el público en general comience el proceso de sanación.
“Lo tienen presente las 24 horas del día. Se ha añadido a la carga psicológica colectiva en todo el país, provocando una necesidad acuciante de servicios de salud mental”, agrega Thieren, que explica que “los problemas de salud mental parecen extenderse rápidamente entre la población del país” y “el sufrimiento humano es inmenso”.
Además, según ha observado, “la gente ya no se siente segura, y esto supone un cambio total en su historia reciente”.
Sólo se ha identificado a la mitad de las 1400 víctimas
Médicos y expertos forenses siguen trabajando para identificar los cadáveres. Todos están envueltos en bolsas de plástico. Hay cuerpos de adultos y cuerpos de niños, pero la gran mayoría de las bolsas no tienen forma.
A pesar de que Israel tiene algunos de los mejores médicos forenses del mundo, sólo 700 de las víctimas han sido identificadas efectivamente hasta ahora.
“Esto, por supuesto, es increíblemente impactante para aquellos que están haciendo este trabajo”, comentó Thieren.
Ciudades fantasma
“He visitado ciudades fantasma en el sur cuya población ha sido evacuada. Todavía se respira el terrible hedor a muerte. He escuchado a muchas personas contar sus historias. Supervivientes, heridos, psiquiatras, médicos, socorristas y soldados; sus relatos son horribles”, relató antes de afirmar que “la sombra de la conmoción y el dolor nacionales ha sumido a este país en la oscuridad”.
Salud mental en emergencias
La OMS es el principal organismo que presta asesoramiento técnico sobre salud mental en las situaciones de emergencia. En 2022, la Organización está trabajando en esta esfera en varios países y territorios afectados por emergencias masivas, como Afganistán, Bangladesh, Etiopía, el Iraq, Jordania, el Líbano, Libia, Nigeria, la República Árabe Siria, la Ribera Occidental y Franja de Gaza, Sudán del Sur, Turquía, Ucrania y el Yemen.
La experiencia de la agencia de la ONU ha permitido recopilar datos y estadísticas acerca de las situaciones traumáticas de emergencia, entre los que cabe destacar:
- Casi todas las personas que soportan una situación de emergencia sufren alguna forma de malestar psíquico cuya gravedad se aminora con el tiempo en la mayoría de los casos.
- Uno de cada 5 personas (es decir, el 22%) que ha vivido bajo un conflicto bélico o violento en algún momento de los 10 años previos padece depresión, ansiedad, trastorno por estrés postraumático, trastorno bipolar o esquizofrenia.
- Las personas que padecen trastornos mentales graves presentan son más vulnerables durante las emergencias; por ello, requieren servicios de atención a la salud mental que satisfagan sus necesidades básicas.
- De acuerdo con las directrices internacionales, estos servicios son necesarios a varios niveles, desde la asistencia básica hasta la clínica, y debe ponerse a disposición recursos para satisfacer de inmediato las necesidades de las personas que presentan determinados problemas urgentes de salud mental
- A pesar de la tragedia que representan y de su efecto en la salud mental de las personas, las situaciones de emergencia ofrecen la posibilidad de establecer sistemas de salud mental sostenibles para todas las personas que los necesitan.