Cada 2 de noviembre se conmemora el Día Internacional para Poner Fin a la Impunidad de los Crímenes contra Periodistas, una jornada para destacar los riesgos a los que se enfrentan estos profesionales durante los procesos electorales.
Según datos de la Organización de las Naciones Unidas para la Educación, la Ciencia y la Cultura (UNESCO), entre 2019 y 2022 se produjeron 759 agresiones contra periodistas durante 89 elecciones en 70 países.
En 2024, 81 países a nivel global celebrarán comicios, por lo que el organismo pidió hacer “un verdadero esfuerzo” para proteger a estos profesionales.
La violencia aumenta durante las elecciones
El jefe de la sección de Libertad de Expresión y Seguridad de los Periodistas del organismo, Guilherme Canela, habló con Noticias ONU sobre las principales preocupaciones para 2024, considerado un “año superelectoral”.
“UNESCO está diciendo: miren, estamos documentando que hay una tendencia a que la violencia contra los periodistas aumente durante los procesos electorales. Entonces, sabiendo esto de antemano, con evidencias muy concretas, hagamos un verdadero esfuerzo para que el año que viene la cobertura de los procesos electorales pueda darse de manera pacífica y que los periodistas puedan hacerlo de manera profesional e independiente en este súper año electoral de 2024″, declaró.
Las agresiones registradas por la agencia involucran ataques físicos y digitales, asesinatos, detenciones arbitrarias y la obstrucción del trabajo de los periodistas, ya sea a través de amenazas o la destrucción de equipos.
El informe El papel de los funcionarios encargados de hacer cumplir la ley: Garantizar la seguridad de los periodistas durante las manifestaciones públicas y las elecciones, presentado este jueves por el organismo, señala también la desinformación como factor de riesgo para los procesos electorales.
En concreto, varios de estos comicios tendrán lugar en América Latina, entre ellos México, Brasil (elecciones locales), El Salvador, Uruguay y Perú, entre otro, especificó Canela.
Las nuevas tecnologías y el auge de la desinformación
En relación con la desinformación, el responsable declaró que “este tema nos preocupa enormemente, entre otras cosas porque los avances en inteligencia artificial generativa, que tienen aspectos enormemente positivos para diversos ámbitos de nuestra vida, también permiten acelerar la desinformación en diferentes campos, incluso durante los procesos electorales. Y lo nuevo aquí es lo que llamamos las cuatro V: velocidad, volumen, viralidad y verosimilitud”.
Según Canela, esta es una razón adicional para proteger a los periodistas, porque “una de las formas de combatir esta desinformación es con un trabajo periodístico profesional de calidad“.
También señaló que un mensaje central del informe es la necesidad de que los líderes políticos, religiosos y famosos dejen de propagar narrativas generalizadoras contra el periodismo o los periodistas, ya que las pruebas demuestran que fomentan la violencia contra los profesionales de los medios de comunicación.
Intimidación contra las mujeres
Otro punto que preocupa a la agencia es el aumento de la intimidación y la violencia en línea contra las mujeres periodistas en todas las partes del mundo. Citando otro estudio propio, Canela mencionó la relación entre violencia y misoginia.
“Las mujeres periodistas que entrevistamos nos dijeron que son particularmente atacadas cuando están cubriendo temas que, según la visión misógina de quienes las atacan, son áreas de las que las mujeres no deberían hablar. Y una de esas áreas es precisamente la política”.
“Una cantidad significativa de estas mujeres reportan consecuencias duras en la área de salud mental en función de esta violencia en línea”, añadió.
Israel-Palestina
Sobre los peligros que corren los periodistas en situaciones de conflicto, Canela recordó que en la primera semana de la crisis en Israel y Gaza se registró el mayor número de muertes en años de periodistas que trabajan en estas situaciones.
También señaló que la protección de las infraestructuras de telecomunicaciones es fundamental “para garantizar el flujo de información que puede salvar vidas”.
“En el caso concreto de la UNESCO, en relación con este y otros conflictos, llevamos mucho tiempo señalando que lo que se conoce como el cierre de internet no es algo que esté respaldado por el derecho internacional de los derechos humanos”, añadió Canela.
El experto subrayó que los periodistas desempeñan un papel fundamental a la hora de documentar lo que ocurre en una situación de conflicto.