El Alto Comisionado de las Naciones Unidas para los Refugiados, Filippo Grandi, acogió con satisfacción este miércoles un nuevo acuerdo entre los miembros de la Unión Europea para reformar su sistema migratorio conjunto, que promete un enfoque innovador y unificado para abordar las solicitudes de asilo.
Sellado en Bruselas, el Nuevo Pacto sobre Migración y Asilo fue resultado de tres años de intensas negociaciones y entraría en vigor en 2024.
El acuerdo intentará distribuir a los inmigrantes de manera más equitativa en todo el bloque europeo, brindando mayor apoyo y coordinación para procesar solicitudes fuera de Estados fronterizos como Italia y Grecia, a través de un “mecanismo de solidaridad”.
Ahora hay que implementarlo
Grandi felicitó a la Unión y la Comisión Europeas “por alcanzar un acuerdo político sobre el pacto europeo sobre migración y asilo”, y agradeció especialmente a la comisaria de Asuntos Internos de la Unión, Ylva Johansson, “por su persistencia y liderazgo”.
“Es un paso muy positivo. Ahora hay que implementarlo. La Oficina del Alto Comisionado para los Refugiados (ACNUR) está lista para asesorar y apoyar”, subrayó Grandi.
La migración ha sido durante mucho tiempo un tema divisivo dentro de Europa, y algunos países se ven obligados a soportar una parte desproporcionada de los desafíos de gestionar la migración irregular, pagando un alto costo por la protección de sus fronteras nacionales.
Según la Comisión Europea (CE), el Nuevo Pacto sobre Migración y Asilo es un conjunto de regulaciones y políticas para crear un proceso de migración y asilo más justo, eficiente y sostenible.
Cinco áreas clave
El acuerdo cubre cinco áreas clave, incluidas regulaciones relativas a la identificación de nacionales de terceros países a su llegada; desarrollar bases de datos comunes; hacer más eficientes los procedimientos de asilo, retorno y fronteras; establecer el nuevo mecanismo de solidaridad; y garantizar que el bloque europeo esté preparado para hacer frente a futuras crisis migratorias.
Antes de este acuerdo, el Pacto ya había aportado recomendaciones y orientaciones sobre búsqueda y rescate, así como un mecanismo voluntario de solidaridad entre los miembros de la Unión Europea.
La presidenta de la Comisión Europea, Ursula von der Leyen, aplaudió el acuerdo y destacó la gestión de la migración como “un desafío europeo que requiere soluciones europeas”.
“Cada año, cientos de miles de migrantes irregulares emprenden peligrosos viajes para llegar a nuestras fronteras. A menudo son víctimas de delincuentes, contrabandistas y traficantes que los atraen con falsas promesas de salvoconducto y les extorsionan”, dijo en un comunicado.
Von der Leyen añadió que el pacto garantizará que los Estados miembros “compartan el esfuerzo de manera responsable, mostrando solidaridad con quienes protegen sus fronteras externas y al mismo tiempo previenen la migración ilegal a la Unión Europea”.
