Coordinadora de la ONU visita Egipto para aumentar la ayuda a Gaza
La nueva coordinadora para la ayuda humanitaria a Gaza, la holandesa Sigrid Kaag, visitó este miércoles las ciudades de Al Arish y Ráfah, en Egipto, desde donde se organiza el envío de ayuda para la población civil de la Franja de Gaza.
Kaag dijo que ha podido ver de “primera mano cuánto está haciendo Egipto, los voluntarios y el Gobierno, para dar asistencia a civiles inocentes en Gaza.
La coordinadora visitó el paso de Ráfah, así como la vecina ciudad egipcia de Al Arish, a cuyo aeropuerto llega la ayuda antes de ser trasladada a Gaza.
Los camiones con ayuda entran a través del cruce de Ráfah al paso de Al Awya, entre Israel y Egipto, donde son inspeccionados por las autoridades israelíes.
“Estoy aquí por mandato del Consejo de Seguridad para ver cómo podemos facilitar, acelerar y agilizar todas las áreas de la asistencia que tanto se necesita para los civiles dadas las graves condiciones humanitarias en las que tienen que vivir”, explicó en declaraciones a la prensa.
Kaag inició el martes en El Cairo su primera visita a la zona desde que fue nombrada en diciembre. Allí se reunió con varios ministros y representantes de la Media Luna Roja.
Guterres pide en Davos apoyo a la solución de los dos Estados, Israel y Palestina
Desde el Foro Mundial de Davos, el Secretario General afirmó que el conflicto en Gaza es una prueba clara de que la comunidad internacional debe apoyar la solución de dos Estados en los Territorios Palestinos Ocupados para resolver la crisis “de una vez por todas”.
“Reitero mi llamamiento a un alto el fuego humanitario inmediato en Gaza y a un proceso que conduzca a una paz duradera para israelíes y palestinos, basada en una solución de dos Estados. Esta es la única manera de frenar el sufrimiento y evitar un desbordamiento que podría incendiar toda la región”, dijo.
Una confrontación en toda regla entre Israel y el Líbano “sería un desastre total”, insistió António Guterres
Las empresas de inteligencia artificial buscan beneficios de forma temeraria
Guterres advirtió en Davos de que las empresas tecnológicas persiguen de forma temeraria los beneficios de la inteligencia artificial y pidió medidas urgentes para mitigar los riesgos de este sector en rápido crecimiento.
El Secretario General dijo que cada avance en IA generativa hace crecer el riesgo de que haya “consecuencias imprevistas”.
Guterres vinculó los riesgos de la IA a los que plantea la crisis climática y afirmó que la comunidad internacional no tiene una estrategia para hacer frente a ninguno de los dos.
En su intervención, el máximo responsable de la ONU retó a los representantes de la industria tecnológica a colaborar con los gobiernos para poner barreras a la IA.
“Esta tecnología tiene un enorme potencial para el desarrollo sostenible, pero el Fondo Monetario Internacional acaba de advertir de que es muy probable que empeore la desigualdad. Poderosas empresas tecnológicas ya persiguen beneficios con un temerario desprecio por los derechos humanos, la privacidad personal y el impacto social“, dijo
Guterres afirmó que los organismos internacionales como la ONU deben desempeñar un papel para garantizar que la IA sea una fuerza positiva y mitigar riesgos.
Nueve meses de conflicto en Sudán
El conflicto en Sudán dura ya nueves meses y ha obligado a huir de sus hogares a casi ocho millones de personas. La Organización Internacional para las Migraciones ha hecho un llamamiento a la comunidad internacional para que no abandone a los sudaneses.
Seis millones de personas están desplazados dentro de Sudán, mientras que 1,7 millones más han huido a través de las fronteras hacia los vecinos Sudán del Sur, Chad, Etiopía, Egipto, la República Centroafricana y Libia.
“Se necesita urgentemente un alto el fuego en Sudán para que la población pueda reconstruir su vida con dignidad. No debemos dar la espalda al sufrimiento de millones de personas afectadas por un conflicto tan devastador”, declaró Amy Pope, tras su reciente visita al este de Chad
En 2024, la OIM solicita 307 millones de dólares para llegar a 1,2 millones de sudaneses.