El Secretario General se mostró “horrorizado” por el ataque perpetrado el viernes contra un convoy de ambulancias frente a un hospital en la Franja de Gaza, y reiteró su llamamiento a un alto el fuego humanitario.
“Estoy horrorizado por el ataque en Gaza contra un convoy de ambulancias frente al hospital Al Shifa. Las imágenes de cadáveres esparcidos por la calle frente al hospital son estremecedoras”, declaró António Guterres a última hora de este viernes, hora de Nueva York.
Afirmó que no olvidaba los atentados terroristas cometidos en Israel por Hamás y los asesinatos, mutilaciones y secuestros, incluidos los de mujeres y niños. Subrayó que todos los rehenes retenidos en Gaza deben ser liberados inmediata e incondicionalmente.
Guterres añadió que, durante casi un mes, los civiles de Gaza, incluidos niños y mujeres, han sido asediados, se les ha negado ayuda, han sido asesinados y bombardeados para expulsarlos de sus hogares.
“Esto debe terminar”, subrayó.
Ningún lugar es seguro
Guterres señaló además que la situación humanitaria en Gaza es “horrible”.
“No llegan alimentos, agua ni medicinas suficientes para satisfacer las necesidades de la población. El combustible para abastecer a los hospitales y las plantas de agua se está agotando”, dijo, señalando que los refugios de la agencia de la ONU que asiste a los refugiados palestinos (UNRWA) estaban casi al cuádruple de su capacidad total “y están siendo alcanzados por los bombardeos”.
“Las morgues están a rebosar. Las tiendas están vacías. La situación sanitaria es pésima. Aumentan las enfermedades y las afecciones respiratorias, sobre todo entre los niños. Toda una población está traumatizada. Ningún lugar es seguro”.
Respetar el derecho humanitario
Renovando sus llamamientos en favor de un alto el fuego humanitario, el Secretario General subrayó que debe respetarse el derecho internacional al respecto.
“Hay que proteger a los civiles y las infraestructuras civiles, incluidos los trabajadores y los bienes humanitarios y médicos. Los civiles tampoco deben ser utilizados como escudos humanos”, afirmó, instando también a que se permita la entrada segura en Gaza y a través de ella de suministros y servicios esenciales, así como el acceso sin trabas de la ayuda humanitaria “a una escala acorde con esta dramática situación”.
El titular de la ONU subrayó que “todos los que tienen influencia deben ejercerla para garantizar el respeto de las normas de la guerra, poner fin al sufrimiento y evitar una extensión del conflicto que podría envolver a toda la región”.